¹ Por tanto, si hay algún estímulo en Cristo, si hay algún consuelo de amor, si hay alguna comunión del Espíritu, si algún afecto y compasión, ² hagan completo mi gozo, siendo del mismo sentir, conservando el mismo amor, unidos en espíritu, dedicados a un mismo propósito.
³ No hagan nada por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de ustedes considere al otro como más importante que a sí mismo, ⁴ no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás.
⁵ Haya, pues, en ustedes esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, ⁶ el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, ⁷ sino que se despojó a Sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres. ⁸ Y hallándose en forma de hombre, se humilló Él mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. ⁹ Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le confirió el nombre que es sobre todo nombre, ¹⁰ para que al nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, ¹¹ y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Nueva Biblia de las Américas (NBLA) Copyright © 2005 by The Lockman Foundation La Habra, California 90631 Sociedad no comercial - A Corporation Not for Profit Derechos Reservados - All Rights Reserved www.NuevaBiblia.com (Español) www.lockman.org (English)